Chanel por fin se ha dado a conocer una de las campañas Otoño-Invierno 2009/2010 más esperadas y que con más retraso siempre llega. A la maison francesa le gusta hacerse de rogar y si es Karl Lagerfeld quien sigue encontrándose tras la cámara, aún va a más esta política de imagen tan bien medida.
En sus desfiles Chanel pone en juego toda la maquinaria para deslumbrar al mundo pero en cambio, en sus campañas la sobriedad domina. Es algo sorprendente, pero que les funciona (sino no lo harían). Entre las campañas más sencillas cada temporada no es de extrañar que se cuele la suya.
A mí me gustan, son elegantes, transmite otro estilo de publicidad. Hacen guiños a técnicas anteriores, Lagerfeld es un mago de la composición de la escena y si las seis letras que componen Chanel son negras, rígidas y frías, ¿por qué no lo iban a ser sus campañas?
En la campaña Otoño-Invierno 2009/2010 repite Heidi Mount aunque ahora lo hace acompañada. Y la elegida ha sido Freja Beha Erichsen, la chica rebelde de las pasarelas, una de las modelos fetiches del kaiser alemán, como bien analizaba mi compañero Sergio.
Tonos sepias, antigüedad y dos modelos en una posición muy próxima y con más de un significado a la vista (nada que ver con lo de Dsquared2). Esto es Chanel.
